Parques naturales y playas
Estar en Cuba significa disfrutar de playas de arena finísimas, cocos, palmera y aguas cristalinas. A cien kilómetros de La Habana se encuentra Varadero, una playa mítica con toda la infraestructura necesaria para el disfrute del viajero.
Otras playas no tan famosas, pero igual de espectaculares que se pueden disfrutar son Cayo Largo, Cayo Guillermo, Cayo Coco, Cayo Santa María, Playa Ancón, Playa Santa Lucía o Playa Esmeralda.
Si el viajero busca la montaña y no el mar en Cuba puede disfrutar de numerosos parques naturales en los que se puede contemplar la naturaleza casi en estado virgen. Visitas especiales son las que se pueden realizar a los Parques Nacionales Alejandro de Humboldt, Desembarco del Granma y al Gran Parque Nacional Sierra Maestra.
Sabor
En una tierra privilegiada por la naturaleza como la cubana se produce uno de los cafés más exquisitos del mundo. Una vez que se toma una taza de un buen café cubano, nada mejor para completar la experiencia que fumarse un habano, con justicia considerado el mejor tabaco del mundo.
Para los que aman el ron Cuba es el mejor destino, especialmente Santiago de Cuba, cuna de la industria ronera de la Isla.
Por último y no menos importante los que visiten la Isla podrán degustar la tradicional gastronomía y coctelería de la Isla, encabezadas por el tradicional mojito y el daiquirí.
Arte y música
En Cuba se mezcla lo mejor de la herencia española y africana que han dado como resultado una serie de ritmos que han vivificado la música y los ritmos actuales: son, guaracha, cha cha cha, rumba y otras tantas que han hecho y hacen bailar a los que llegan a la mayor isla del Caribe.
Lo mismo en las calles que en las instituciones culturales los turistas pueden disfrutar de una experiencia inigualable que les hará querer volver una y otra vez.
La gente
Si un pueblo en el mundo es desenfado, sociable y cálido es el cubano. Siempre están dispuestos a bromear, cantar y compartir con los visitantes, a los que hacen sentir como en familia.
Sólo por ver La Habana vale la pena pasar horas en un avión. La capital cubana tiene bien ganado su título de Ciudad Maravilla.
Nada iguala a la experiencia de contemplar un atardecer en el Malecón, visitar sus fortalezas coloniales, sus antiguos conventos e iglesias o caminar por el centro histórico de la ciudad.
La ciudad posee excelentes hoteles a precios competitivos, pero también se puede optar por casas particulares con todas las condiciones para una estancia agradable, donde los dueños hacen sentir a los huéspedes como si fueran un cubano más y la mejor experiencia la puedes vivir con nosotros en Casa Castellón.
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